Y por fin llegó el ansiado y esperado día. Ese glorioso día, Festividad de Cristo, Rey del Universo, en el que, los cofrades del Lavatorio de Jaén, depositaron todas sus ilusiones y esperanzas, pensando en que sería uno de los días más importantes en la historia de nuestra joven Hermandad. Y así fue, la celebración salió tal y como estaba programada, no dejando indiferente a nadie; disfrutándola desde el primer instante, con la sana y humana sensación de que el trabajo programado, planificado y desarrollado en las semanas previas, tendría que dar sus frutos, como así fue.
Con la grata presencia de Monseñor D. Ramón del Hoyo López; acompañado del Vicario General y el Vicario Judicial Diocesanos, D. Francisco Juan Martínez Rojas y D. Pedro José Martínez Robles, respectivamente. Junto al Párroco de la Merced y su Vicario Parroquial, D. Juan Jesús Cañete y D. José Peña, respectivamente. D. Agustín Rodríguez, Párroco de la Magdalena, actuando como Ministro de la Liturgia y D. Blas Pegalajar, Capellán de la Hermandad de la Estrella; se completó un presbiterio digno de orgullo y satisfacción, por parte de todos los allí convocados.
La mayoría de las Cofradías de Pasión y Gloria de nuestra capital, todos nuestros Padrinos de Bendición, junto a una amplia representación de las Religiosas Misioneras de la Congregación, Cooperadoras seglares, Colegios Divino Maestro venidos de otras ciudades, representantes del Claustro y Ampa de nuestro Colegio, familiares, amigos, feligreses, etc, abarrotaron una Iglesia que, a la postre, se nos quedó pequeña para albergar la gran cantidad de solicitudes de asistencia y adhesión a la Eucaristía de Bendición.
Finalmente, el afamado grupo litúrgico - musical "Escuch-ARTE", colaboró en el acompañamiento musical de la Celebración, y con su estilo tan especial y particular, hizo que la Celebración ganara en Sobriedad y Solemnidad.
Con todos los ingredientes dispuestos, y nuestras imágenes luciendo esplendorosas en el magnífico Altar de Cultos que la Hermandad elaboró para la ocasión, dio comienzo la Eucaristía de Bendición, presidida por nuestro Obispo Diocesano y organizada escrupulosamente por nuestra Vocalía de Cultos, transcurriendo con la sencillez y naturalidad propias de una Celebración a la altura de nuestra Hermandad, durante la cual, tuvo lugar el esperado Rito de la Bendición, elaborado y muy solemne, tras el cual, se procedió a encender la candelería y a colocar el exorno floral en el Altar de las Imágenes.
A la conclusión de la celebración, nuestro Hermano Mayor, D. Eduardo de Miguel, realizó la preceptiva Acción de Gracias, encontrando unas palabras, llenas de verdad y cariño, dirigidas a todos y cada uno de los que, de una manera u otra, han participado y/o colaborado en dicho Ceremonial. Finalmente, se procedió a entregar un cuadro con nuestras Imágenes a modo de recuerdo, a los padrinos y demás protagonistas del Acto; tras lo cual, tuvo lugar el esperado concierto bendicional, en el patio parroquial, por parte de nuestra Banda de Música "Blanco Nájera", haciendo las delicias de propios y extraños.
Desde aquí, nuestro más sincero y fraterno agradecimiento a todas y cada una de las personas e Instituciones Cofrades que han colaborado con nosotros para el mejor desarrollo de dichos Actos tan satisfactorios y gozosos para nuestra Hermandad; en especial a, D. Juan Jesús Cañete Olmedo y a toda la comunidad Parroquial de la Merced (Hermanas, Cofradías, seglares, etc...), por todas las facilidades dadas para poder trabajar con el sosiego y la tranquilidad necesarias en la Iglesia Parroquial de la Merced, poniendo a nuestra disposición todo lo necesario. Y como no, a las Cofradías de la Divina Pastora de las Almas y la Hermandad de la Estrella, por poner a nuestra disposición, con agrado y amabilidad, representados en sus Fabricanos Generales, gran parte de las joyas de su magnífico patrimonio. Muchas gracias a todos. Dios os lo pague!
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